El lamento de Luis Advincula, el lateral peruano hizo un partido correcto |
Perú perdió 2-1 ante Chile con un doblete del atacante
Eduardo Vargas. El anfritrión se clasificó a la final de la Copa América por
primera vez en casi tres décadas. El seleccionado peruano peleara por el tercer
puesto.
Chile tuvo problemas para imponer su juego de posesión en
los primeros minutos y Perú se atrevía con rápidos contragolpes encabezados por
Jefferson Farfán y Paolo Guerrero que dejaban en evidencia algunos problemas en
la defensa de la "Roja".
Cuando el local pasaba su peor momento, el defensa peruano
Carlos Zambrano cruzó desde atrás con fuerza desleal al volante chileno Charles
Aránguiz y el árbitro venezolano José Argote le sacó la roja directa cuando
recién corrían 20 minutos.
La expulsión de Carlos Zambrano perjudicó al seleccionado peruano |
Con la expulsión, el escenario cambió y Chile comenzó a tener
más opciones y posesión del balón. El hombre menos obligó al técnico Ricardo
Gareca a reconstruir la defensa de su equipo con el ingreso de Christian Ramos
en lugar del extremo Christian Cueva.
A los 20 minutos, Alexis Sánchez encaró por izquierda, metió
un pase entre líneas que no fue conectado por Aránguiz y la pelota dio en el
palo. El rebote le quedó a Eduardo Vargas, en una evidente posición adelantada,
quien sólo tuvo que empujarla para decretar el 1-0.
A los 59 un pase profundo tras una pérdida de balón de
Sánchez encontró por derecha a Luis Advíncula, quien envió un potente centro
que el zaguero Gary Medel envió en contra de su arco para el 1-1.
André Carrillo celebra el empate peruano ante el autogol de Gary Medel |
Chile salió con todo tras el empate y a los 62 fue
nuevamente Vargas, el jugador de la noche y goleador de la Copa, quien anotó
para poner 2-1 al local con un derechazo fuerte e imparable al ángulo.
La alegría duró poco. Eduardo Vargas decretó el 2-1 final para Chile |
El partido ganó en emotividad pero los embates de ambos
equipos no terminaban de inquietar a los goleros, pese a la necesidad de Perú
de anotar un gol para forzar los penales.